Los Periodistas querellados por gerente de Hondutel lo responsabilizan a él por cualquier atentado a sus vidas.
La organización internacional Reporteros sin Fronteras condenó ayer la sistemática intimidación por parte del gobierno hondureño contra los periodistas independientes, cuyo último episodio es la acusación contra seis comunicadores.
“Reporteros sin Fronteras condena los atentados a la libertad de prensa que, durante el mes de septiembre de 2007, se han intensificado en Honduras”, dice un comunicado. El 28 de septiembre, el gerente de la empresa de telecomunicaciones Hondutel presentó una denuncia contra seis periodistas, después de que denunciaran graves actuaciones de corrupción.
“En Honduras, la situación de la libertad de prensa sigue siendo precaria, a juzgar por las intimidaciones y amenazas, y la cantidad de procedimientos emprendidos contra los medios de comunicación, constatados en el último mes. Desgraciadamente, las autoridades no dan muestras de seriedad en la lucha contra la impunidad y los abusos de poder”, precisa la organización mundial.
LAS QUERELLAS
Los periodistas de televisión Rossana Guevara y Renato Álvarez y de radio Melissa Amaya y Juan Carlos Funes fueron querellados por el gerente de Hondutel, Marcelo Chimirri. También se ha anunciado una similar querella contra el director de La Prensa, Nelson Fernández, y contra el jefe de Redacción de EL HERALDO, Carlos Mauricio Flores.
Chimirri alega que se le ha calumniado y difamado porque los medios de comunicación reprodujeron una noticia publicada por el diario El Universal de México, en el que denuncia un millonario fraude contra Hondutel, en el que hay implicados funcionarios y empresarios.
La denuncia fue hecha por la fundación Arcadia, que tiene su sede en Washington, entidad que también denunció que empresas de telecomunicación hicieron transferencias por 70 mil dólares a una empresa de Chimirri. Arcadia pidió investigar esta situación. Chimirri alega que es un acto de venganza porque el vicepresidente de esta fundación, Robert Carmona-Borjas, mantiene una deuda con Hondutel.
ANTE EL COMISIONADO
Los periodistas querellados se presentaron ayer ante el comisionado de Derechos Humanos, Ramón Custodio López, a denunciar al funcionario y advertir que bajo la responsabilidad de él queda cualquier hecho que atente contra los comunicadores y sus familias. “Nosotros le dijimos al Comisionado que si algo nos sucede responsabilizamos al señor Chimirri”, dijo Rossana Guevara.
La del señor Chimirri “es una total intolerancia ante los medios de comunicación. Es en este momento que todos los periodistas debemos hacer una tregua para ver a nuestro alrededor qué es lo que está sucediendo. Nosotros no hemos cometido ningún delito, simplemente hemos ejercido nuestro derecho a informar”.
Melissa Amaya dijo que como comunicadora se ha limitado a cumplir con el derecho de informar al pueblo hondureño. Los periodistas denunciaron la campaña intimidatoria que se origina desde el Poder Ejecutivo y plantearon que la historia recogerá que la administración del presidente Manuel Zelaya será juzgada como la más intolerante de los últimos años.
VIOLAN LEYES
Para el abogado Rigoberto Ochoa, las querellas contra periodistas “vulneran el derecho a la libertad de expresión” y ponen al Estado hondureño en precario ante los tratados internacionales. Honduras actualmente es signataria de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, la Convención Americana de los Derechos Humanos y el Pacto Internacional de los Derechos Civiles y Políticos.
Estos convenios estipulan que “todo individuo tiene derecho a la libertad de opinión y de expresión; este derecho incluye el de no ser molestado a causa de sus opiniones, el de investigar y recibir informaciones y opiniones, y el de difundirlas, sin limitación de fronteras, por cualquier medio de expresión”.
Pero, además de esto, a lo interno del país se violenta la misma Constitución de la República y la Ley de Libre Emisión del Pensamiento. Para acudir a la instancia internacional, los comunicadores querellados tienen que agotar la instancia interna, la cual todavía no ha comenzado, ya que los escritos fueron recibidos en la Secretaría del Tribunal de Sentencia, pero hasta la tarde de ayer no habían recibido su respectiva numeración y asignación a las salas.
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2007 / Octubre
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